El turismo internacional mostró en septiembre de 2025 una nueva ampliación del desequilibrio entre los argentinos que viajan al exterior (turismo emisivo) y los visitantes que llegan al país, de acuerdo con la Encuesta de Turismo Internacional (ETI) difundida por el Indec.
Sigue el boom del turismo emisivo pero se desploman los arribos internacionales
En septiembre, los viajes de argentinos al exterior (turismo emisivo) crecieron 21,8%, mientras que el turismo receptivo cayó un 18,9%.
En contraste con el turismo emisivo, el receptivo inernacional experimentó una caída interanual de 18,9.
El saldo negativo alcanzó los -331,7 mil turistas, reflejando un aumento sostenido del turismo emisivo y una contracción del receptivo.
En total, 706,4 mil argentinos viajaron al exterior, mientras que 374,8 mil turistas no residentes ingresaron a Argentina, consolidando una tendencia que se observa desde comienzos de 2024.
El turismo emisivo crece en todos los frentes
Según el organismo, en el noveno mes del año, el turismo emisivo registró un aumento interanual de 21,8%, impulsado por una fuerte demanda hacia destinos regionales y europeos.
El 65% de los viajeros argentinos eligió países limítrofes, principalmente Brasil (22%) y Chile (17,5%), aunque Europa volvió a posicionarse como un principal destino con 107,4 mil turistas en septiembre. (Ocupación hotelera: el turismo interno impulsa la hotelería argentina y compensa la caída internacional)
Por vía aérea se concretó el 54,7% de las salidas, mientras que el 37,9% se realizó por pasos terrestres.
El crecimiento del turismo emisivo fue generalizado en todos los corredores: Ezeiza y Aeroparque aumentaron 29,3% en el trimestre, Córdoba 69,2% y Mendoza 44,9%.
Caída del turismo receptivo y predominio regional
En contraste, el turismo receptivo experimentó una caída interanual de 18,9%, con 374,8 mil llegadas de turistas no residentes.
El 68,7% provino de países limítrofes, en particular Brasil (24,8%), Uruguay (18,7%) y Chile (13,5%), lo que confirma la fuerte dependencia del mercado regional.
Por vía aérea ingresó el 50,3% de los turistas extranjeros, seguido por la vía terrestre (37,7%) y la fluvial/marítima (12%).
Los pasos relevados por la ETI concentraron el 58,5% del total de arribos internacionales.
El Aeropuerto de Ezeiza y el Aeroparque Jorge Newbery recibieron 514 mil turistas no residentes en el tercer trimestre, un 12,4% menos que en 2024, mientras que los ingresos por el Paso Cristo Redentor y el Puerto de Buenos Aires también mostraron retrocesos.
Cómo gastan los turistas: diferencias entre quienes llegan y quienes se van
El informe también revela marcadas diferencias en la composición del gasto turístico entre los visitantes extranjeros y los viajeros argentinos.
En el turismo receptivo, el gasto total se distribuyó principalmente en alojamiento (26,6%), gastronomía (24,3%), compras (18,8%) y transporte (15,2%).
Entre las actividades más realizadas se destacan las visitas culturales (56,2%), la gastronomía (65,1%), las compras (63,1%) y el turismo de naturaleza o enoturismo, que continúa ganando terreno en destinos del interior.
En cambio, el turismo emisivo argentino muestra un patrón de consumo diferente: transporte (30%), compras (26,6%), alojamiento (20%) y gastronomía (14%) fueron los rubros de mayor participación. (Turismo interno y desarrollo: los grandes desafíos de Argentina)
Esto refleja viajes de mayor distancia y duración, con una fuerte concentración en destinos internacionales de ocio y en el uso de hoteles de alta categoría o alquileres temporarios.
Desequilibrio agravado en la comparativa
El acumulado de salidas de turistas argentinos al exterior durante los primeros nueve meses de 2025 alcanzó 6,3 millones de viajeros, lo que representa un incremento interanual del 23,7% respecto al mismo período de 2024, cuando se habían registrado 5,1 millones de salidas.
En contraposición, la llegada de turistas extranjeros al país totalizó 3,2 millones de visitantes no residentes entre enero y septiembre de 2025, cifra que marca una caída del 12,4% frente al acumulado de 2024 (3,7 millones).
En términos absolutos, Argentina dejó de recibir a más de 457 mil turistas internacionales en los primeros nueve meses del año, consolidando un desequilibrio estructural creciente entre el flujo emisivo y el receptivo.
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