El Obelisco cambió para siempre. En el aniversario número 89ª de su construcción, el monumento más emblemático de la Ciudad Buenos Aires sumó una novedad histórica: un ascensor interno y un mirador a 67,5 m. de altura que promete convertirse en una de las experiencias turísticas más impactantes de la urbe.
El Obelisco de Buenos Aires ahora tiene mirador: cómo es la nueva experiencia panorámica en el corazón porteño
Casi 89 años después de su inauguración, el Obelisco de Buenos Aires cumple un viejo sueño: estrena ascensor y mirador. Valentín Díaz Gilligan subraya el potencia turístico del flamante atractivo.
Un sueño de 1936 hecho realidad: el Obelisco estrena mirador con ascensor panorámico con vistas únicas de la Ciudad de Buenos Aires.
El proyecto, largamente anhelado desde los tiempos de su inauguración en 1936, quedó finalmente concretado y le da al visitante la posibilidad de ver la ciudad desde una perspectiva inédita: cuatro ventanas hacia el cielo urbano porteño, justo en el corazón de la 9 de Julio.
Un ascenso histórico y panorámico
El nuevo ascensor del Obelisco es un logro de ingeniería tanto por su instalación como por su integración con la estructura original.
Con una pared vidriada y otra con pantalla, permite ascender al monumento en apenas un minuto.
El ingreso se realiza desde la Plaza de la República, luego de superar ocho escalones, y al llegar a la cima, un tramo final de 35 escalones conduce al mirador.
“El mirador panorámico es un nuevo atractivo turístico que cambiará la manera de ver nuestra Ciudad y su patrimonio, como en las grandes metrópolis del mundo”, afirmó el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri.
Ciudad de Buenos Aires: patrimonio, tecnología y un nuevo atractivo para el turismo
La instalación del ascensor se realizó sin afectar la estructura del monumento, que es Monumento Histórico Nacional. Además, se renovaron las instalaciones eléctricas y se colocó una escalera metálica como alternativa en caso de emergencia.
“Lo que hace especial este lugar es la vista. No hay otro punto en la Ciudad desde donde se pueda verla así”, destacó la vicejefa de Gobierno, Clara Muzzio.
Para Ignacio Baistrocchi, ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, el desafío fue técnico y simbólico: “El ascensor entró por partes y se armó adentro, porque la puerta original es el único punto de ingreso”.
En este orden, los funcionarios destacaron que la semana pasada también se reemplazó el pararrayos por primera vez desde su inauguración. "El trabajo fue realizado con una inmensa grúa de la que colgaba una jaula con dos operarios", ponderaron.
Visitas gratuitas en mayo y operación futura
Durante mayo -y como parte de los festejos por el aniversario del Obelisco- se ofrecerán visitas gratuitas con cupo limitado para vecinos de la Ciudad.
El Ente de Turismo de la Ciudad (EnTur) está desarrollando un proceso licitatorio para definir al operador del espacio, que incluirá una propuesta museográfica.
“El mirador nos va a dar la posibilidad de ofrecer a los visitantes una experiencia que va más allá de la típica foto con el monumento”, señaló Valentín Díaz Gilligan, presidente del organismo, para detallar: “Gracias al trabajo conjunto con el sector privado, los turistas van a poder acceder a una vista panorámica inigualable”.
Valor agregado para el sector turístico
Desde el sector turístico celebran la incorporación de este nuevo atractivo.
Pablo García, operador receptivo y guía local, opinó que “el mirador del Obelisco es una joyita que muchos estábamos esperando. Le da un valor simbólico y emocional muy fuerte al recorrido por Buenos Aires, especialmente para quienes nos visitan por primera vez”.
¿Cómo visitar el mirador del Obelisco?
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Ubicación: Plaza de la República, en la intersección de 9 de Julio y Corrientes.
Altura: 67,5 metros.
Acceso: Ascensor interno + 35 escalones finales.
Visitas: Gratuitas durante mayo con cupo. Luego, se anunciará el régimen general.
Ingreso: Solo con turno y en grupos reducidos por cuestiones de seguridad.
Un sueño de 1936 que finalmente se concretó
La idea de subir al Obelisco por ascensor no es nueva. Ya en 1936, el entonces intendente Mariano de Vedia y Mitre mencionaba la intención de incorporar un elevador para que “el pueblo acceda a la cúspide del monumento”.
Hoy, casi 89 años más tarde, ese proyecto se hizo realidad, revalorizando uno de los íconos más queridos de la Ciudad de Buenos Aires.
Cabe recordar que el Obelisco fue creado por el arquitecto Alberto Prebisch para celebrar los 400 años de la primera fundación de Buenos Aires. Allí, en la Plaza de la República, fue izada por primera vez la bandera nacional en la Ciudad.
"Este Obelisco será, con el correr de los años, el documento más auténtico de este fasto glorioso del cuarto centenario de la ciudad fundada por Don Pedro de Mendoza. Dentro de las líneas clásicas en que se erige, es como una materialización del alma de Buenos Aires, que va hacia las alturas, que se empina sobre sí misma para mostrarse a los demás pueblos y, desde aquí, proclama su solidaridad con ellos", había declarado el Intendente porteño el sábado 23 de mayo de 1936, día de su inauguración.
Hoy es Monumento Histórico Nacional, se debe resguardar, y preservar su exterior. Originalmente estaba revestido con lajas de piedra blanca calcárea de Córdoba, que en 1939 fueron cambiadas por revoque porque algunas se desprendieron.
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