Turísticamente, es momento de observar a la provincia de Entre Ríos más allá de su extenso circuito de complejos termales, famosos en Argentina. El destino, comienza a posicionarse con otras propuestas pensadas para despertar el interés de quienes suelen ir a las termas en búsqueda de relajación.
Entre Ríos: una provincia siempre dispuesta a reinventarse
Ladevi charló en exclusiva con el secretario de Turismo de la provincia de Entre Ríos, Jorge Diego Satto, acerca de los atractivos característicos del destino.
Con una ubicación privilegiada entre los ríos Paraná y Uruguay, la provincia combina historia, naturaleza y una gastronomía en auge, que los ha beneficiado en la adaptación a las nuevas tendencias del mercado.
Historia y naturaleza: los comienzos de Entre Ríos
Satto es consciente de que el trabajo para construir Entre Ríos como se la conoce en la actualidad, ha sido muy complejo.
El aislamiento histórico de la provincia, a la que anteriormente solo se accedía cruzando en balsa, fue un factor clave en la conformación de su historia.
Lugares emblemáticos como Concepción del Uruguay, donde se encuentran los restos de Urquiza, y el Palacio San José, su histórica residencia, recuerdan cómo la organización nacional se gestó en gran parte en esta provincia.
Este componente histórico sigue siendo un atractivo turístico de relevancia para quienes buscan conocer más sobre la formación del país
"El valor turístico de Entre Ríos radica en su geografía única, abrazada por dos de los ríos más importantes del país, lo que le otorga un encanto especial”, manifiesta.
Estas aguas no solo permiten la práctica de deportes náuticos y pesca, sino que también contribuyen a la identidad histórica de la región.
El impulso de la gastronomía de Entre Ríos
La formación y dedicación de los profesionales gastronómicos ha posicionado a Entre Ríos como un destino culinario en crecimiento.
La provincia no solo es el mayor productor de pollo en Argentina, con un 60% del total nacional, sino que también aprovecha la riqueza de sus ríos para ofrecer pescados frescos, en especial en las zonas más cercanas al litoral.
Además, la gastronomía local ha incorporado productos autóctonos que realzan la identidad entrerriana, como el fruto del yatay, típico del Parque Nacional El Palmar.
"El yatay se ha integrado recientemente en el Código Alimentario Nacional, gracias a sus propiedades nutricionales y su versatilidad en la cocina. Se emplea principalmente en la elaboración de licores, aderezos y mermeladas, convirtiéndose en un distintivo culinario de la región", menciona el funcionario.
El enoturismo como producto emergente
Si bien históricamente la vitivinicultura supo ser un sector asociado a Entre Ríos, algunas decisiones políticas hicieron que el mercado tenga varias ataduras para operar libremente.
De todos modos, actualmente la provincia cuenta con al menos 70 establecimientos dedicados a la producción de vinos.
"Aún no disponemos de circuitos formales, pero valoramos el contacto directo entre los turistas y los productores de las bodegas, que en su mayoría son atendidas por sus propios dueños", manifiesta Satto.
Este vínculo cercano entre el visitante y el productor añade un valor diferencial al enoturismo en la provincia, que se posiciona cada vez más como una opción emergente.
Escapadas: la clave del turismo moderno en Entre Ríos
Otro de los aspectos que enfatizó el secretario, fue la importancia de las escapadas como tendencia en el turismo actual.
"Hoy en día, los turistas no buscan largas estadías de 15 días, sino que prefieren hacer varias escapadas durante el año, aprovechando fines de semana largos o períodos cortos de descanso”, afirmó.
En este sentido, la proximidad de Entre Ríos con grandes centros urbanos como Buenos Aires o Rosario, es una ventaja competitiva, ya que permite a los visitantes desconectar sin recorrer grandes distancias.
Los bungalows se han consolidado como una de las opciones de alojamiento más populares en la provincia, especialmente aquellos ubicados cerca de playas o dentro de los complejos termales.
Satto señaló que este tipo de hospedaje es elegido por su comodidad y por la sensación de hogar que ofrecen a los turistas. "Se están construyendo cada vez más opciones de alojamiento dentro de las bodegas, lo que complementa la oferta enoturística que sigue en expansión.", agregó.
Potenciar la oferta turística a través de las microrregiones
Finalmente, puntualizó en la estrategia provincial de potenciar las microrregiones, con el objetivo de que los turistas puedan disfrutar de una amplia gama de experiencias en distancia cortas.
“Nuestro objetivo es que, en un radio de 100 kilómetros, el turista pueda pasar por un complejo termal, disfrutar de un carnaval, descansar en la playa, realizar actividades de pesca, visitar propuestas de turismo religioso y probar nuestra gastronomía”, reveló el secretario.
Este enfoque integral busca maximizar el tiempo de los visitantes y ofrecer una experiencia diversa y enriquecedora en cada escapada.
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