La semana pasada una nueva tormenta azotó al turismo estudiantil, aunque el derrotero fue paliado por la experiencia –es el tercer cimbronazo desde que existe la normativa para este segmento y el segundo en dos años–, de funcionarios y dirigentes.
La “tormenta económica” ahora llevó a la quiebra a Wayla Turismo y afecta a 1.700 estudiantes
La Faevyt y el SecTur resolvieron saldar el incumplimiento de casi 1.700 contratos activando la ejecución del Fondo Fiduciario. Además, se firmó acta con un grupo de seis empresas para trasladar a los pasajeros.
Tal como anticipó este medio, Wayla Turismo le confirmó a la SecTur que ya no podría hacerse cargo de los casi 1.700 contratos firmados para lo que resta del año y 2020. Pertenecen a secundarios de Buenos Aires, Bariloche, San Luis, Rosario y Córdoba.
En términos nominales, el monto total de los viajes que la firma incumplirá asciende a $ 80 millones, y corresponde a viajes a Cuba (700) y Fortaleza (1000).
No obstante, se trató de la formalización de una situación que se veía venir desde hace meses, pero que nadie pudo o quiso evitar. Semanas atrás, Wayla Turismo debió ser rescatada por la SecTur, Havanatur y la Faevyt para que un grupo de estudiantes no se quede varado en Cuba, porque la compañía no había pagado la totalidad de los terrestres; mientras que, que en enero pasado la compañía recibió una multa de $ 500 mil por parte de la Defensoría del Consumidor de Córdoba por incumplir contratos en esa capital.
Por tanto y en rigor de que esta crisis no vuelva a desnudar las falencias en los controles del sistema de turismo estudiantil, la Faevyt y la SecTur resolvieron saldar el incumplimiento de los contratos activando la ejecución del Fondo Fiduciario –que, de todos modos, demostró ser una aspirina para un cáncer–; y agencias y prestadores se comprometieron a sostener la prestación de los servicios en Cuba y Brasil.
¿FINAL FELIZ?
“Se firmó un acta con un grupo de seis empresas para trasladar a los pasajeros en el presente año”, señalaron desde la SecTur y la Faevyt, quienes reconocieron que la mayor parte de la Cuota Cero estaba abonada.
En este aspecto, Adrián Manzotti, titular de la Comisión de Turismo Estudiantil y vice 2° de la Faevyt, afirmó que el grupo de 600 chicos que debía viajar este año a Fortaleza lo hará, pero a Camboriu, porque pese a que la ley de Turismo indica que se debe respetar el destino, ninguna firma está habilitada para operar en dicha ciudad brasileña. “Saldrán el 19 de noviembre en micro”, detalló, para agregar que la propuesta de ocho noches con pensión completa, incluye dos excursiones y cinco boliches.
Consultado por el contingente que tenía pagado su viaje para 2020 –se trata de 700 y 400 pasajeros que tenían contratado el viaje a Cuba y Fortaleza, respectivamente–, sostuvo que estos casos se tratarán más adelante, pero aseguró que los pasajeros viajarán aunque podría cambiar el destino de Brasil.
Por tanto, al cierre de esta edición y hasta el lunes, la SecTur continúa oficializando a las empresas que llevarán a los grupos, para luego contactarse con las familias damnificadas.
Sin embargo y a pesar de la “Cuota Cero”, los egresados no podrán tener el viaje acordado puesto que este fondo no cubre la totalidad de los servicios de los paquetes premium. Recordemos que el fideicomiso cubre sólo los servicios básicos (transporte y hotel), del resto tienen que hacerse cargo las agencias o los prestadores, y no todas las empresas están en condiciones de asumir el costo de los extras.
EL OJO DEL HURACÁN.
Con el tercer siniestro en 12 años, la Faevyt volverá a la carga para modificar la ley de Turismo Estudiantil, siendo el manejo del fideicomiso uno de los puntos álgidos. “Debemos cambiar. Queremos un fideicomiso más transparente y que haya un mayor control”, declaró Manzotti.
En esta línea, desde Suipacha 1111 advirtieron que la normativa debe aggiornarse pero subrayaron que hay que poner el foco en la comercialización. “El sistema económico nacional obligó a constituir un arreglo operacional de dos y hasta tres años, para que el cliente pueda pagar”, indicaron, para concluir: “El problema fue que las empresas no contemplaron los incrementos inflacionarios”.
“NO NOS ESCONDEMOS, PORQUE NO ESTAFAMOS A NADIE”
Destacó el director de Wayla Turismo, Pablo Alfonso, en conversaciones con Ladevi Medios y Soluciones; al tiempo que recalcó que “pese a los años de esfuerzo, de haber apostado e innovado en destinos y de habernos extendido con la apertura de sucursales a nivel federal, fuimos víctimas de una situación económica insostenible”.
En efecto, detalló que el 645% de la devaluación acumulada desde 2015, y el 300% de inflación, sumado a otros hechos de inseguridad jurídica, los obligaron a no poder cumplir con los servicios.
Asimismo, Alfonso explicó que “la gota que rebalsó el vaso comenzó a principios de año cuando una aerolínea incumplió una operación chárter que estaba paga, y debieron poner dinero para contratar otros pasajes”; mientras que agregó: “Los detonantes fueron que un gran caudal de pasajeros no pudo pagar la totalidad del viaje y terminamos financiando nosotros esta parte, sumado a la devaluación después de las PASO”.
Para terminar, el director de Wayla Turismo remarcó que han cumplimentado oportunamente con todos los requisitos formales en cuanto a garantías legales exigidas por la autoridad de aplicación.
En número
1.700 son los estudiantes afectados por la quiebra de Wayla Turismo.
6 las agencias que se harían cargo de los servicios básicos.
$ 80 milllones es el monto total de los viajes que incumplirá la firma.