En un marco económico de alza del dólar y menores ventas emisivas, Amichi saca a relucir sus 32 años como especialista de turismo nacional. “Con tanta experiencia, sabemos que en contextos similares los residentes tienden a viajar más dentro del país. Y nosotros contamos con toda la estructura y la logística necesaria para abastecer esa demanda en cada uno de nuestros destinos”, expresó Rodolfo Amendola, director general de la operadora.
AMICHI. La confiabilidad de un líder en turismo nacional
Ante un escenario donde se prevé el crecimiento del turismo interno, vale recordar el mérito de llevar 32 años de trayectoria en el segmento, así como destacar productos que dan cuenta de una operatoria cuidada y exclusiva.
De este modo, el líder en el segmento nacional se erige como un puerto seguro ante la coyuntura: “En los momentos difíciles, las agencias buscan la confiabilidad. Y tanta trayectoria se refleja en la mejor oferta del mercado, tanto en precio como en calidad de producto”.
En este sentido, los estándares de Amichi son más que satisfactorios, testeando permanente cada proveedor. “Esto también nos permite contar con productos exclusivos o diseñados por nosotros mismos”, completó Amendola.
TORRES DEL PAINE Y EL HOTEL GUAMINÍ.
El director compartió un par de ejemplos que demuestran la singularidad de la operatoria de Amichi. En primer lugar se refirió a la programación en El Calafate: “En este caso operamos la visita a Torres del Paine con pernocte incluido. Muchos lo ofrecen en excursión, saliendo de El Calafate sin siquiera desayunar y volviendo temprano, en un servicio regular de bus. Nosotros contratamos un vehículo exclusivo, con guía, que permite viajar con tranquilidad durante la mañana y quedarnos prácticamente solos en Torres del Paine hasta su cierre, admirando el atardecer. Es una experiencia única, cuya modo de operatoria también aplicamos en El Chaltén”, explicó Amendola.
Otro gran destaque es el Guaminí Misión Hotel, ubicado a orillas del río Paraná, en Puerto Iguazú. “Su construcción siguió los lineamientos de la arquitectura jesuita, incluyendo su portal, que replica los portales de las ruinas de San Ignacio. A ello se suma un museo que refleja la historia de las misiones jesuitas a través de piezas originales y visitas guiadas que finalizan con una proyección audiovisual. Tras este recorrido muchos salen emocionados e incluso nos han comentado que la cronología presentada es perfecta”, destacó el ejecutivo.
Asimismo, los huéspedes pueden desayunar a orillas del río y cenar en el restaurante, erigido en una construcción que imita la iglesia de las mencionadas ruinas misioneras. En el futuro, el hotel contará con un muelle, para ir navegando hasta el pueblo. También vale mencionar que el Guaminí Hotel, inaugurado en diciembre de 2016, cumple con varias acciones de RSE con las comunidades locales.
Por supuesto, las propuestas clásicas y exclusivas de Amichi se extienden más allá, a todo lo largo y ancho de nuestro país, y solo es cuestión de ponerse en contacto para constatarlo.
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