En un contexto de dólar “planchado”, alta inflación e incertidumbre generalizada –lo que repercute en la macroeconomía y por supuesto en nuestro sector turístico–, el trade local mostró optimismo de cara a 2024. En la 47° edición de ECTU el sector ratificó que el interés por captar las oportunidades sigue intacto.
Congelamiento, quietud y rebote
En los pasillos del Hotel Buenos Aires Marriott los operadores mayoristas presentes en el evento reconocieron que, luego de un 2023 con números récord en algunos casos hasta diciembre, el periodo de las elecciones y la necesidad, de alguna manera, de “congelar” tarifas, hubo mucha anticipación de compra y eso generó una quietud de las ventas al comienzo del año.
No obstante, confirmaron que ya se está notando una demanda por la temporada europea, y los empresarios esperan un importante “rebote” a partir de marzo, gracias al contexto actual.
“2024 da la sensación de que será un buen año. La tendencia es buena, es creciente y muy apoyada en el segmento premium”, comentaron los mayoristas.
Europa y Copa América
Consultados por productos y destinos, el común denominador de los profesionales aseveró que Europa y algunos destinos exóticos siguen siendo las “estrellas” de la temporada.
La Copa América de Fútbol, que se celebrará en Estados Unidos a mediados de año, también está marcando el pulso de las ventas.
“Se está vendiendo todo, tanto paquetes armados a medida como hotelería suelta, trenes y circuitos tradicionales empaquetados”, aseguran.
¿Cómo afectó la desregularización?
Respecto a si existe un temor en el sector de que surja nueva competencia o improvisados actores comerciales a raíz del megaDNU propuesto por Javier Milei para la actividad, los empresarios del turismo señalaron que “aún es demasiado temprano para medir el impacto”.
“Claramente fue un momento de shock y también mostró algunas de las debilidades que tenemos como industria. Pero habrá que dejar correr un poco más de tiempo para ver si el efecto es significativo. Hay que ser cautelosos”.
En ese orden, algunos operadores añadieron que han notado pedidos de alta de agencias, con permisos precarios que quedaron en el limbo del nuevo decreto y no tienen la licencia definitiva. Sin embargo, no están dando de alta a cualquier persona no vinculada al turismo.
“Hubo una explosión de demanda de gente que dijo ‘quiero vender turismo’, pero nuestra actividad sigue teniendo una barrera de entrada y un conocimiento técnico que no cualquiera tiene”, mencionaron.
Vale aclarar que estos testimonios se recogieron en la previa al rechazo del DNU por parte del Senado nacional, lo que ha generado la expectativa de que el decreto finalmente caiga.
Tipo de cambio e inestabilidad
A su vez, los profesionales observan que los principales problemas para los negocios del sector continúan siendo los impuestos, la incertidumbre devaluatoria y la inestabilidad de precios.
“El tema del tipo de cambio produce que la gente esté con una expectativa devaluatoria, lo cual hace que haya un retraso de las ventas y entre a jugar la especulación. Esperemos que haya estabilidad en el mediano plazo ya que eso hará que proyectemos mejor los negocios”, afirman.
También aclaran que “será clave tener más lobby político. Un Presidente que determina que somos un monopolio es un desconocedor total del sector, aunque también merecemos un mea culpa por tal situación. Hay que repensar el concepto que transmiten nuestros representantes y la importancia que tenemos como agentes de viajes”.
“Necesitamos una legislación clara del contrato de agentes de viajes y sobre todo una mejor regulación del turismo estudiantil”, señalaron los asistentes a ECTU, entre los temas que más inquietan.
¿2024 será un buen año?
A pesar de lo mencionado, las expectativas son positivas: “El mercado se acomodará a los nuevos precios. Sabemos que hay inflación en Europa, quizás no a nuestros niveles, y seguimos con menos conectividad que en prepandemia, algo que impacta en los precios”.
“Asimismo, debemos tener cautela porque incluso los precios en dólares están aumentando. Hay que tenerlo en cuenta. Nuestros clientes nos comentan que los pasajeros extrañan las cuotas”, analizaron.
La palabra de los minoristas
Muchos agentes dieron el visto bueno a que, ante la desregularización de la actividad, por lo menos existan registros, como el de Faevyt, para que así se distinga a los agentes de una manera más profesional.
Igualmente, mencionaron que las estafas ya existían incluso con la Ley de Agentes de Viajes en funcionamiento.
En ese sentido, algunos agentes se mostraron a favor de la derogación, argumentando que genera más trabajo y oportunidades, pero recalcando que quienes se sumen deben capacitarse.
“Lo que va a marcar la diferencia es la profesionalización de los agentes. No es lo mismo que venda un influencer a que venda un profesional con años de estudio y capacitación”, espetaron.
En esa línea, la inteligencia artificial y su aplicación fue otro de los temas discutidos: “Creemos que es imposible, por lo menos de manera completa, justamente, por factores como la profesionalización misma del agente y el saber cómo vender el destino o asistir a los pasajeros”.
“Consideramos que debería usarse como complemento a la actividad y como herramientas para que las tareas sean más sencillas. Es una realidad a la cual hay que adaptarse y capacitarse todo el tiempo, así como para otros factores”, resaltaron.
Los destinos nacionales y el receptivo, ¿en crisis?
En lo que refiere a destinos nacionales y el momento del receptivo, los representantes dijeron que “necesitamos seguir presentes en ferias turísticas y eventos, pero, a su vez, sabemos que estamos en niveles de turistas internacionales mucho más bajos que otros años”.
“Esperamos recuperar pronto la demanda y los récords de visitantes. Necesitamos que mejore la economía del país y que se sigan generando planes y acciones para fomentar el turismo tanto nacional como internacional. Nuestra actividad derrama rápidamente resultados, así que anhelamos que se recompongan la falta de conectividad y las reglas claras de comercialización, si bien creemos que será un buen año”, finalizaron.
Vale aclarar que los representantes de destinos nacionales consideran también que “Argentina se volvió muy cara, pero igual el turista extranjero sigue viniendo porque le sigue conviniendo”.
En ese sentido, resalta la flamante acción del PreViaje Iguazú, una iniciativa que el destino propone con ofertas y descuentos para turistas que viajen del 1° abril al 30 de junio, en alojamiento, gastronomía, transporte y atractivos turísticos.
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