El trasfondo de una decisión en contra del turismo

“¿Qué se esconde detrás de esta decisión que parece no tener mucho fundamento científico ni económico? Quizás evitar que la gente viaje por las vacaciones de invierno para evitar contagios y entre tanto detener la economía; o atentar contra la salud y otras urgencias de quienes necesitan sí o sí viajar dentro del país; o quizás asfixiar la industria del turismo, lo cual contradice los anuncios de que se apoyaría a la actividad por la capacidad de generar empleo a nivel federal, de traer divisas sumando a la balanza comercial, de mover las economías regionales, de generar orgullo de pertenencia y de frenar las inmigraciones a las grandes ciudades; o esperar que el turismo se active antes en otros países de la región con mejor capacidad de reacción frente a la pandemia, y que Argentina les regale el negocio mientras se va borrando del mapa de destinos del mundo; o el foco estará en lograr que las compañías aéreas quiebren, se vayan del país y que quede como única compañía Aerolíneas Argentinas? Esto no puede ser posible, ya que en las urnas el pueblo votó por un modelo que los integre, que les dé trabajo, oportunidades y conectividad. Las low cost permitieron acercar distancias para gente que no podía viajar, abrieron horizontes y competitividad. Latam y tantas otras generan tantos puestos de trabajo y permiten que cada empresa se vaya superando, que la oferta crezca y con ella el futuro del país. Cuatro meses más con todo parado, sin medir el tendal de empresas y emprendedores, sin medir el impacto económico. Argentina paga cargas sociales por todo esto, desangra la economía y mientras se emiten billetes. ¿No sería mejor trabajar para que se reactive el turismo en lugar de matarlo?. Junto con las líneas áreas, ¿Cuántos hoteles y prestadores de servicios van a morir?. Asimismo, emisión del billetes, más brecha cambiaria entre dólar oficial y dólar ilegal, mas inflación: una bomba de tiempo”.