Previo a la confirmación de la extensión del aislamiento social, preventivo y obligatorio -en principio hasta el 10 de mayo- y con el grifo de las flexibilizaciones sin incluir a los rubros turísticos, Alberto Fernández, presidente de la Nación, resolvió ampliar el programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP).
El anabólico económico estatal para pagar salarios no funcionará para mantener de pie a las pymes
Entre otras medidas, el Estado será responsable de pagar hasta la mitad de los salarios de las empresas en crisis como consecuencia de la cuarentena, cualquiera sea el tamaño de la firma, y el mismo se extenderá mientras se prolongue el confinamiento.
¿A PEDIR DE TURISMO?
El refuerzo estatal llegó en medio de las negociaciones que el ministro de Turismo, Matías Lammens, está llevando adelante con Matías Kulfas, ministro de Desarrollo Productivo, para diseñar una batería de propuestas específicas que atiendan la problemática actual y futura de la industria turística.
Sin embargo y si bien el DNU provocaría una bocanada de aire para los empresarios turísticos, además de una respuesta del Gobierno al sector, desde las gremiales empresariales lamentan no ser parte de la mesa chica que define el futuro de las pymes; así como alertan que siguen a la espera de las nuevas medidas específicas prometidas, porque lo anunciado no alcanzará para detener la herida.
Para calmar a las fieras y luego de una reunión de seguimiento con la esfera privada, el ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, se comprometió a redireccionar a favor del sector un crédito a tasas muy bajas. Se trata de unos US$ 32 millones otorgados por el Banco Interamericano de Desarrollo al MinTurDep, y que se destinarán para la asistencia de las pymes turísticas y no así para obras de infraestructura.
“GRACIAS, PERO.”
“Estamos analizando los alcances de la reglamentación y el primer balance es bueno”, resumió Aldo Elías, presidente de la CAT, quien valoró: “La propuesta está en sintonía con los reclamos y planteos que le hicimos al Presidente”.
Consultado sobre los encuentros virtuales entre Lammens y Kulfas, Elías destacó el compromiso estatal, pero reconoció que esperan que en los próximos días se vayan cumpliendo los puntos que se trataron en la Quinta de Olivos; y sostuvo: “Entre los temas pendientes sobresalen el otorgamiento de los créditos a tasa blanda con un año de gracia, los cuales se utilizarán para capital de trabajo y no pagar salarios; la eliminación de la gestión de retención y percepción de impuestos, y la eliminación de los impuestos no aplicados directamente a las empresas como débitos y créditos bancarios”.
Por caso, la Faevyt rescató que el Gobierno está escuchando al sector y que están pronunciando medidas para aliviar a las empresas de la crisis provocada por el Covid-19, aunque aseveraron que no alcanzan. “Es positivo que nos ayuden a pagar el 50% de los sueldos, pero con una facturación en cero desde hace un tiempo, es imposible afrontar el porcentaje del sueldo restante y sostener la estructura”, declaró Gustavo Hani, titular de la Faevyt, quien agregó que no quieren subsidios, sino créditos a tasa cero o realmente blandos.
A su vez y tras admitir que hasta el momento el saldo de las propuestas solicitadas al Gobierno es negativo, recalcó que le plantearon a la AFIP la postergación de todos los vencimientos impositivos, y posteriormente el otorgamiento de una moratoria amplia de los impuestos no pagados por este período de crisis.
Para terminar, Hani ponderó que la eliminación del impuesto PAIS en los servicios turísticos sigue siendo una prioridad para la Faevyt, y comentó: “Le dije al Presidente que el primer día en que las agencias vuelvan a vender, necesitarán de este beneficio para reactivar los negocios y la respuesta fue favorable”.
Por su parte, desde la AHT aplaudieron que los anuncios son inclusivos y que alcanzan a pequeñas, medianas y grandes empresas sin discriminar la cantidad de trabajadores que empleen; aunque admitieron que “esperaban que el Estado cubriera la totalidad de los sueldos y las contribuciones patronales”.
Asimismo, desde la entidad que conduce Roberto Amengual lamentaron que hasta el momento no hubo novedad sobre la anulación del pago del básico de los servicios públicos contratados y el diferimiento de pagos de los servicios públicos variables hasta fin de 2020, con planes de pago flexibles para toda la actividad a partir de enero de 2021.
Fernando Gorbarán, presidente de la AOCA, ratificó que durante la reunión del Comité de Crisis de la CAT con Lammens plantearon la necesidad de ampliar los beneficios económicos para la actividad turística aun después de que termine la cuarentena, y reconoció: “Estamos expectantes de que se instrumente el decreto de la asistencia estatal para pagar salarios”.
A su turno, Gerardo Díaz Beltrán, titular de la CAME, explicó que “los anuncios darán tranquilidad y certidumbre a las pymes”, pero señaló: “Esto no soluciona nada”.
TODOS EN LA MISMA BOLSA
Respecto a los alcances de la asistencia estatal, el DNU firmado por el Jefe de Estado fija que "el monto de la asignación será equivalente al 50% del salario neto del trabajador o de la trabajadora correspondiente al mes de febrero de 2020, no pudiendo ser inferior a una suma equivalente a un salario mínimo, vital y móvil ni superar dos salarios mínimos, vitales y móviles, o al total del salario neto correspondiente a ese mes".
A su vez, el Ejecutivo ofrecerá la posibilidad de elegir entre "la postergación o reducción de hasta el 95% del pago de las contribuciones patronales al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) devengadas en abril"; al tiempo que dispuso el “crédito a tasa cero para personas adheridas al Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes y para trabajadores autónomos en las condiciones que establezcan la Jefatura de Gabinete y el Banco Central”
El salvataje económico de alrededor de 420 mil pymes le costará al Gobierno unos US$ 13 mil millones, lo que significa un 3% del PBI. “Es esto o cerrar el país”, describió un dirigente gremial, quien resaltó que “la crisis derivó en que las empresas se convertirán en estructuras mixtas y dependerán del Estado”.